Manifiesto

NUESTRO RÍO, UN ESPACIO NATURAL ÚNICO

El Cega, seña de indentidad de la Tierra de Pinares, discurre a lo largo de un paisaje de frondosos sotos, cañones, pinares y pequeños humedales con los que forma un ecosistema sin parangón en el interior peninsular. El privilegio de su situación y su excelente estado de conservación convierten al río y a su entorno en uno de los mejores corredores ecológicos de España y en un frágil santuario natural que sirve de refugio, en plena meseta, a especies de flora y fauna propias de latitudes más frías y húmedas.

El cañon del Cega.

Salto de agua en el Molino del Ladrón.

UNA CORRIENTE CIUDADANA

Ante las graves amenazas que acechan a nuestro río, nace la plataforma CEGA, EL RÍO QUE NOS UNE, una corriente ciudadana que une pueblos de Segovia y Valladolid.

El Cega es patrimonio natural y cultural de nuestra comarca y atesora unos valores que merecen ser protegidos. Necesitamos el río como espacio común, el fluir de sus limpias aguas ha acompañado a innumerables generaciones de nuestros paisanos y no podemos permitir que el Cega muera a causa de un uso insostenible.

Ranúnculos en los Farallones.

LAS AMENAZAS DEL CEGA

El cambio climático prevé un escenario de escasez de agua que acentuará la delicada situación del Cega (en los últimos veinte años ha perdido un 40% de su caudal según datos de la Confederación Hidrográfica del Duero).
Su principal amenaza son las extracciones abusivas para el riego; pero además sufre vertidos incontrolados, contaminación y deterioro del bosque de ribera, factores que ponen en riesgo la frágil dinámica natural del río.

Dos proyectos en curso son especialmente alarmantes:

1. La recarga del Carracillo. Con un coste total de 42,6 millones de euros (79 % administración y 21 % regantes), es un proyecto diseñado para satisfacer las crecientes demandas de agua de la Comunidad de regantes del Carracillo.

La Recarga plantea derivar anualmente del río Cega hasta 14 hectómetros cúbicos de agua, equivalente al triple del volumen del pantano de las Vencías en el río Duratón. Con este fin se permitiría extraer hasta el 70% del caudal circulante.
Lógicamente este escenario supone un desastre ecológico para el Cega.

Pero las consecuencias llegan aún más lejos: la estrategia que propone la tercera fase del proyecto consiste en depositar el agua del Cega en el pinar de Gomezserracín, para posteriormente recuperarla a través de 82 sondeos, grandes balsas de acumulación y kilómetros de canalizaciones. Con este planteamiento no sólo estará en peligro esta masa forestal de 1000 hectáreas sometida a un gran estrés hídrico por inundación y extracción, sino también la última reserva de agua no contaminada de la comarca, que se encuentra bajo ella y corre el riesgo de ser contaminada y sobreexplotada. Igualmente, con la depredación de este nuevo acuífero estará en peligro todo el ecosistema forestal de la parte central de la tierra de pinares.

Plano del proyecto.

Se trata de un proyecto al servicio de las agroindustrias (el 85 % del consumo de agua del Carracillo lo realizan una decena de macroempresas) que agrava los problemas de escasez y contaminación de las aguas y destrucción de los ecosistemas. Su tercera fase ha recibido ya el visto bueno de la administración y supone por ello un peligro inminente para el río y su ecosistema de pinares.

Tratamientos en cultivos intensivos.

2. La presa de Lastras de Cuéllar. Con un coste total de 92 millones de euros pagados por las administraciones públicas, pretende crear un embalse sobre el río Cega en los términos de Lastras de Cuéllar, Zarzuela del Pinar y Aguilafuente y una capacidad de 44 hectómetros cúbicos.

El objetivo es, una vez más, abastecer las demandas de riego a costa del río Cega. De hecho, 14 hectómetros cúbicos (1/3 de su capacidad total) se destinarían anualmente a la Comunidad de regantes del Carracillo.

Zona anegada por la presa de Lastras de Cuéllar.

Como consecuencia de la construcción de la presa, 700 hectáreas de pinares y bosque de ribera de enorme valor, tanto ecológico como económico y cultural, quedarían anegadas bajo una lámina de agua de escasa profundidad (sería el mayor embalse de la provincia de Segovia por superficie). Destacando la destrucción del manantial de Las Fuentes de Aguilafuente, que actualmente sirve como abastecimiento de agua potable de calidad para cinco localidades de la zona. Además, su carácter de embalse de regadío aleja la idea del mismo como zona de recreo o “lago suizo”. Por el contrario, se adivina la estampa de un paraje desértico, debido a que el embalse se encontraría parcialmente vacío durante la mayor parte del año.

Todas estas circunstancias, unidas a las posibles complicaciones técnicas del proyecto, han generado un fuerte rechazo social y el surgimiento de la plataforma Sí a las Fuentes, que cuenta con amplios apoyos en toda la comarca.

OBJETIVOS DE LA PLATAFORMA “CEGA, EL RÍO QUE NOS UNE”

1. Cumplimiento de las normativas internacionales mas avanzadas en cuanto a gestión de aguas que consideran al agua como patrimonio natural y bien común de todos nosotros. (Directiva Marco del Agua, El Plan Hidrológico de la UNESCO Informe para los Recursos Hídricos de la ONU…). 
2. Proteger el río Cega, porque sus Riberas constituyen un importante ecosistema fluvial, cuyo valor ecológico está amparado por la Red Natura 2000, están declaradas como Zona de Especial Conservación y son merecedoras de ser Reserva Natural Fluvial. 
3. Se abandone el proyecto de recarga del Carracillo porque se ha mostrado ineficaz y su 3ª fase presenta enormes incertidumbres sobre su funcionamiento e impredecibles consecuencias. 
4. Se desestime definitivamente la presa de Lastras de Cuéllar por ser un proyecto al servicio de las agroindustrias, sin justificación real y un con enorme impacto ambiental que inundaría 700 Has de bosques. 
5. Evitar la inversión en las prioridades en el uso del agua y su privatización encubierta. El acuífero de los Arenales ha sido fuente de abastecimiento de agua de calidad para nuestros pueblos, pero la sobreexplotación y contaminación agropecuaria de las últimas décadas lo ha contaminado gravemente. La ONU y nuestra Ley establecen como prioridad el consumo poblacional antes que los usos agrarios. 
6. Se controlen las extracciones de agua para riego en toda la cuenca de modo que se anulen las extracciones ilegales y el resto de concesiones se ajusten a la realidad del río como ecosistema acuático, evitando los tramos secos. 
7. Se eliminen los focos de vertidos al río porque deterioran la calidad de su agua y destruyen toda la vida asociada al mismo, suponiendo un grave peligro para quienes nos acercamos a él como lugar de ocio y recreo. 
8. El escenario presente de Cambio Climático exige adaptarse a la nueva situación. La Estrategia Española de Cambio Climático, así como la Estrategia para la Transición Hidrológica, exigen una gestión con un verdadero ahorro y nula contaminación del agua.